Con este ritual se evita el quiebre de una empresa o negocio, además de alcanzar el éxito con mucha rápidez. Preferentemente debe realizarse en un jardín, pero en el caso de no ser posible, debe utilizarse una maceta grande, el día que debe realizarse es en jueves. En la mañana de un día de un jueves, tomar un puñado de migas de pan con la mano izquierda y con la derecha cavar un pozo profundo en la tierra. Dirigir la vista al cielo e intentar mirar fijamente al Sol durante todo el tiempo posible. Cuando ya no pueda sostener la mirada al Sol porque lo ha encandilado, comenzar a enterrar las migas pronunciando
la siguiente oración:
El Sol y la Tierra, que poseen la generosidad de ser la fuente inagotable de la vida, harán fecundo este pan que les entrego. Propicien ustedes la prosperidad y la abundancia, y alejen de mí la pérdida y la carencia
Todos los días Jueves (y durante nueve semanas) regar la tierra con medio vaso de agua, en el cual se habrán dejado sumergidas durante toda la noche, varias monedas doradas.
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